Experimentarnos detenidos
Una de las razones por las cuales solemos ver pasar el tiempo sin lograr avances significativos en nuestros proyectos, se relaciona a que buscamos constantemente tener claridad absoluta en los pasos que deberemos dar para obtener lo que buscamos. ¡Queremos controlar toda la ruta, dominar el camino por delante!
Y como no alcanzamos a ver todo completamente delante de nosotros solemos detenernos, postergar decisiones o acciones. Congelamos la ejecución y profundizamos la introspección, generamos un pensamiento circular y nos convertimos en testigo del tiempo que avanza y nos aleja de lo que queremos. Y la angustia y presión suelen incrementar.
Pensamos planes, los analizamos y, por querer comprenderlos a detalle, los hacemos más complejos y rebuscados. Vamos añadiendo nuevos detalles y mas elementos, nos enrollamos profundamente. Y con ello provocamos la frustración añadida de experimentarnos detenidos, pasmados, ante lo que no logra ocurrirnos. ¡Nos hemos estancado!
Cómo romper la cadena mental que nos detiene
Escuché una reflexión por parte de Michael Hyatt que me ha parecido magnifica y de mucha ayuda para tu servidor.
Imaginemos que vamos conduciendo en una carretera de noche, con mal clima, y debemos llegar a un destino definido. Necesitamos visualizar, en la ruta que ejecutamos, únicamente los primeros 100 metros frente a nosotros. Eso nos permite avanzar. Ver los primeros metros y animarnos a continuar pues mas allá, sobre la ruta, buscaremos observar nuevos metros disponibles para nosotros.
Acostumbrarnos a colocar tramos cortos en la ruta, que nos permitan avanzar, y nos protejan de la tentación ansiosa de ver todo el panorama antes de actuar, debe ser un principio de acción que debemos procurar y que debemos transformar en un poderoso hábito para lograr constancia y eficacia en nuestro desempeño.
Conforma planes inmediatos
Si ya tienes un poco más de claridad en el objetivo a lograr, podrías ir un poco más allá.
Piensa en las primeras 5 acciones que podrías realizar que te acercarán un poco mas a lo que deseas. Pasos cortos que te permitan iniciar el movimiento. Pequeños avances. Posibilidades inmediatas dentro de tu control y acción personal.
Pensar en cinco pasos, sencillos para moverte, aunque no tengas aún decidido o predeterminado el resto de las acciones, puede funcionar como un trampolín que te acerque cada vez más a lo que deseas materializar en tu vida.
¿Cuáles podrían ser esos 5 pasos?
¡Te reto a construir una lista ahora mismo! ¡Rápido!, ve por hoja y pluma. No lo dejes para mañana porque tu motivación podría decaer. Te espero, puedes dejar algún comentario si te has decidido por algún plan de acción inmediato.
¡Nos leemos pronto por acá!