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Continuamos considerando actitudes básicas para cultivar en nosotros y poder desarrollar conscientemente nuestro liderazgo.
ACTITUD 2: Confianza en Dios
Referencia bíblica
“Quien confía en su riqueza, ese caerá, los justos brotarán como el follaje” Proverbios 11, 28-29
Regularmente: ¿colocas toda tu esperanza en tus fuerzas y capacidades personales?
¿Has considerado cómo es una jornada donde experimentas confianza en Dios? ¿Qué proyectas a tu equipo de trabajo en un día como este?
¿Has considerado cómo es una jornada cuando no tienes presente la Providencia Divina? ¿Cómo influye esto tu relación con otras personas y con tu equipo de trabajo?
Clave / pensamiento rector para la segunda semana
Cuando confías en Dios plenamente cuentas con Él para todo aquello que pueda provocarte inquietud.
Pautas generales a trabajar durante los siguientes días
1. Acércate de modo más consciente a Dios a lo largo de esta semana, reflexiona sobre el encuentro personal que tienes con Él.
¿Qué tienes que hacer para crecer tu confianza en Dios?
¿Cuántas inquietudes y preocupaciones comentas dentro de tu oración cotidiana?
¿Estás dispuesto a dejar en manos De Dios todo lo que te ocupa y preocupa?
2. Sigue la senda de los mandamientos que Dios nos ha propuesto
¿Cómo están presentes los 10 mandamientos en tu día a día?
¿Cómo hacer realidad el onceavo mandamiento con tu equipo de trabajo?
3. Ante un problema o imprevisto, antes de acometer la resolución, encomienda tus acciones y ofrece la mortificación que esto supone. Sacrifica conscientemente tu comodidad.
Elige una jaculatoria que puedas pronunciar en momentos de dificultad a lo largo de esta semana.
Durante la Eucaristía, ofrece a Dios toda mortificación presente en tu vida.